Conocer los planes de estudio y las ofertas de trabajo que dan ciertos países es clave para que tu experiencia sea exitosa…
Para viajar cualquier pretexto es bueno, pero si a la experiencia turística se le suma la posibilidad de generar nuevos conocimientos que, al mismo tiempo, pueden ayudarte a migrar de forma legal a otro país, el viaje se convierte en todo un plan de vida.
En buena medida gracias a la globalización, cada vez más instituciones de educación superior ofrecen nuevas alternativas para realizar estudios experimentando de cerca la cultura y estilo de vida de otros países.
De acuerdo con Paola Pérez, consultora de la agencia Mundo Joven en programas de idiomas y de estudio y trabajo, no existe una edad o un monto económico límite para poder hacer realidad este sueño.
“Está abierto prácticamente para todo el mundo. Dependiendo del programa, pueden solicitarlo con edades desde 16 años en adelante, e incluso tenemos programas para solo estudiar el idioma en los cuales el límite de edad no existe”, detalla.
¿Qué debo saber antes de elegir un programa de estudios en el extranjero?
La cantidad de tiempo que se va a invertir en los estudios, las cosas que te interesan e incluso hasta elegir un estilo de vida activo o más tranquilo, son puntos clave a evaluar antes de iniciar un programa de este tipo.
“Partimos desde lo que esté buscando cada individuo, de ahí vamos a ofrecer un programa que se va a adecuar a sus necesidades y también el destino por las características de las diferentes ciudades.
“Cada personalidad se va a adaptar a diferentes destinos: hay gente que le gustará estar en una ciudad grande, a lo mejor gente que vive en la Ciudad de México y quiere algo similar, entonces Toronto, Nueva York o Londres son ciudades que le van a servir. Gente que busca un nivel de vida más tranquilo podría preferir Victoria o Montreal”, argumenta Pérez.
Ya que elegiste la materia y el sitio de tus sueños, el siguiente paso es saber dónde están las mejores oportunidades para estudiar y trabajar, pues esto te permitirá generar recursos mientras disfrutas tu estadía en el extranjero.
Australia, Canadá e Irlanda, los favoritos para estudiar y trabajar
De acuerdo con la experta, los planes de estudios propuestos por instituciones en Irlanda, Canadá y Australia son los más atractivos, puesto que ofrecen mucha flexibilidad a la hora de buscar trabajos de medio tiempo.
Mientras que en Irlanda puedes aplicar para estudiar cursos de inglés de por lo menos seis meses, con los que se te expiden permisos de trabajo, en Canadá las condiciones son diferentes.
“En el caso de Canadá, los programas de estudio tienen que ser de carácter académico o vocacional, donde los estudiantes pueden obtener un diploma en negocios, tecnología o turismo, que duran desde seis meses en adelante.
“Los estudiantes que van a programas de educación superior tienen también el permiso de trabajo y, en estos casos, todavía es mejor, porque incluso les abren un permiso con el que pueden quedarse de dos hasta tres años más”, argumenta.
Australia ofrece lo mejor de ambos casos, puesto que puedes viajar a estudiar inglés, como en Irlanda, por un periodo de seis meses, o puedes estudiar alguna carrera o posgrado, con lo que te otorgarán un permiso de residencia aún más amplio.
¿Cuánto tiempo es necesario para planear un viaje?
El tiempo es otro factor importante en la planeación de un viaje de estas características. La experta sugiere tomar en cuenta los papeleos diversos en torno al destino elegido, así como la compra de boletos o la reserva de hospedaje.
“Lo ideal es por lo menos inscribirte con seis meses de anticipación a la fecha que deseas empezar tu proyecto porque, por ejemplo, en el caso de Canadá y Australia es necesario tramitar una visa antes de salir del país.
“El proceso puede durar más o menos entre seis semanas y dos meses entonces lo adecuado es que te inscribas con la suficiente anticipación para obtener la confirmación de la escuela, enviar tus papeles a las embajadas, tener tu visa a tiempo y poder tramitar lo demás, boletos de avión, alojamiento, etcétera”, concluye.
